Una cadete en tierra de gigantes "No llego a los pases de Ricky Rubio, pero me gusta dar muchas asistencia"
FERNANDO BETHENCOURT
Cuando con 15 años, cuatro meses y 12 días, Leticia Romero González pisó por primera vez un parqué de la Liga Femenina de Baloncesto, su equipo, el Gran Canaria 2014 La Caja de Canarias, perdía por una diferencia de 25 puntos en el partido inaugural de la presente temporada.
Su salida dio estabilidad y equilibrio al juego de las amarillas y propició el momento de la remontada frente al conjunto rival, el Olesa-Espanyol. "Esto hizo que ella perdiera el miedo escénico a la máxima competición y que los técnicos cogiésemos confianza a la hora de ofrecerle minutos de juego, sabiendo que ella va a responder", aseguró su entrenador y principal valedor, Domingo Díaz.
Talento puro, visión de juego y dotes de mando. Por la mañana Leticia es una niña normal de cuarto de la ESO en el colegio Nuestra Señora del Rosario de Agüimes. Por la tarde, una jugadora ambiciosa que aspira a emular los pasos de ilustres como Blanca Ares, Patricia Hernández u Oranda Rodríguez, otras perlas de la cantera del Islas Canarias. "Cuando salgo a la cancha es para darlo todo, por lo que enseguida se me olvidan los nervios o el miedo que podía tener al principio", señala una promesa del deporte base grancanario, que asegura fijarse en el juego y en la progresión de Ricky Rubio, que debutó con 14 años en la Liga ACB. "Él parece que no ha tenido ningún miedo. Desde joven despuntaba y no le importaba que los demás fueran más grandes. Eso al final es lo que importa y es el camino a seguir", explica la jugadora, de 173 centímetros.
A pesar de su juventud, Leticia, con una gran capacidad para leer el ritmo del partido, juega como un veterana. Tanto en ataque como en defensa suele tomar buenas decisiones. "Es una jugadora realmente futurible, prácticamente de las mejores de España en su edad, pero que todavía tiene que mejorar muchísimos aspectos del juego", advierte su preparador, que, junto al presidente de la institución, Adrian Déniz, ha apostado por ofrecer a la jugadora una ficha de edad superior, una licencia de júnior, para que pueda estar en la dinámica del primer equipo. Sin embargo, el entrenador no la compara con el actual base del FC Barcelona. "Ricky es especial, un jugador que realmente arriesga mucho en sus acciones, le encanta ir en busca del pase imposible. Leticia, en cambio, es una jugadora más cerebral, más de control del juego y muy segura. Es su manera de concebir el baloncesto", afirma éste.
Desde el comienzo del presente curso deportivo, la playmaker de Agüimes ha participado en los seis partidos de La Caja en la máxima categoría nacional, disputando entre 10 y 20 minutos. "A este nivel no se regala nada a ninguna jugadora", señala Díaz para afirmar a continuación que "la realidad es que los minutos que juega se los ha ganado ella".
Para más información:
http://www.laprovincia.es/deportes/2011/01/05/cadete-tierra-gigantes/344636.html
Cuando con 15 años, cuatro meses y 12 días, Leticia Romero González pisó por primera vez un parqué de la Liga Femenina de Baloncesto, su equipo, el Gran Canaria 2014 La Caja de Canarias, perdía por una diferencia de 25 puntos en el partido inaugural de la presente temporada.
Su salida dio estabilidad y equilibrio al juego de las amarillas y propició el momento de la remontada frente al conjunto rival, el Olesa-Espanyol. "Esto hizo que ella perdiera el miedo escénico a la máxima competición y que los técnicos cogiésemos confianza a la hora de ofrecerle minutos de juego, sabiendo que ella va a responder", aseguró su entrenador y principal valedor, Domingo Díaz.
Talento puro, visión de juego y dotes de mando. Por la mañana Leticia es una niña normal de cuarto de la ESO en el colegio Nuestra Señora del Rosario de Agüimes. Por la tarde, una jugadora ambiciosa que aspira a emular los pasos de ilustres como Blanca Ares, Patricia Hernández u Oranda Rodríguez, otras perlas de la cantera del Islas Canarias. "Cuando salgo a la cancha es para darlo todo, por lo que enseguida se me olvidan los nervios o el miedo que podía tener al principio", señala una promesa del deporte base grancanario, que asegura fijarse en el juego y en la progresión de Ricky Rubio, que debutó con 14 años en la Liga ACB. "Él parece que no ha tenido ningún miedo. Desde joven despuntaba y no le importaba que los demás fueran más grandes. Eso al final es lo que importa y es el camino a seguir", explica la jugadora, de 173 centímetros.
A pesar de su juventud, Leticia, con una gran capacidad para leer el ritmo del partido, juega como un veterana. Tanto en ataque como en defensa suele tomar buenas decisiones. "Es una jugadora realmente futurible, prácticamente de las mejores de España en su edad, pero que todavía tiene que mejorar muchísimos aspectos del juego", advierte su preparador, que, junto al presidente de la institución, Adrian Déniz, ha apostado por ofrecer a la jugadora una ficha de edad superior, una licencia de júnior, para que pueda estar en la dinámica del primer equipo. Sin embargo, el entrenador no la compara con el actual base del FC Barcelona. "Ricky es especial, un jugador que realmente arriesga mucho en sus acciones, le encanta ir en busca del pase imposible. Leticia, en cambio, es una jugadora más cerebral, más de control del juego y muy segura. Es su manera de concebir el baloncesto", afirma éste.
Desde el comienzo del presente curso deportivo, la playmaker de Agüimes ha participado en los seis partidos de La Caja en la máxima categoría nacional, disputando entre 10 y 20 minutos. "A este nivel no se regala nada a ninguna jugadora", señala Díaz para afirmar a continuación que "la realidad es que los minutos que juega se los ha ganado ella".
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